¡A entrenar de manera segura!
Saltar a lo (des)conocido te hará más fuerte
Iván González
Publicado el 06 de Enero de 2021
No se respiran los mismos aires. Las celebraciones fueron diferentes, y eso está claro. Hubo quienes festejaron el año nuevo de manera muy discreta, otros prefirieron añorar mejores épocas y extrañar a los seres queridos que estuvieron lejos, y habrá otros que, impactados por los ecos de la cena navideña y fin de año, así como antojitos de la época, consideraron iniciar el año de manera más saludable.
Ahora que ya estamos en enero y oficialmente las fiestas se han terminado, creemos que es el momento ideal para comenzar a cumplir con los propósitos que nos hayamos puesto. Sabemos que en estos momentos acudir a un gimnasio podría ser complicado debido a la situación que vivimos. Piensa en un entrenamiento rápido, efectivo, para el que no necesites mucho material y que se pueda llevar a cabo en tu hogar.
¿Parece imposible? Un entrenamiento con una simple cuerda para saltar tiene todas esas características y, sin embargo, es ignorado por mucha gente.
Podrías considerar saltar la cuerda, es uno de los mejores ejercicios que puedes hacer y solo unos minutos son suficientes para dejarte sin aliento y con los brazos y piernas adoloridas. Si lo haces bien, incluso puede ayudarte a transformar tu cuerpo en 30 días.
Recuerda que saltar la cuerda es un ejercicio que los boxeadores aman, y eso significa que funciona y que es más demandante de lo que recuerdas de tus días en los recreos de la escuela. Si saltar la cuerda te parece cosa de niños y seguramente la tachaste de tu lista para ejercitarte en este nuevo año, bueno, es un error posible de enmendar.
Primero hay que mencionar que se trata de un ejercicio cardiovascular, que al igual que cuando caminamos, corremos, subimos o bajamos escaleras o andamos en bicicleta aumenta la frecuencia cardiaca. Este tipo de ejercicio permite que el cuerpo use el oxígeno eficientemente, de modo que brinda beneficios al corazón, los pulmones y el aparato circulatorio.
También te ayudará a tonificar los músculos. Cuando saltas la cuerda trabajas todos los músculos de tu cuerpo, comenzando con el grupo muscular central, los superiores y los inferiores. A su vez, los abdominales también se contraen por la fuerza de los saltos.
Los músculos centrales de tu cuerpo, abdominales y lumbares se implican al máximo, especialmente en los saltos que requieren más técnica, por ejemplo: saltos cruzados.
Otro punto a considerar es que mejora la actividad de tu cerebro y elimina estrés. Saltar la cuerda te ayuda a desarrollar ambos hemisferios de tu cerebro, lo que permite que aumente diferentes capacidades como la habilidad espacial o tu memoria.
No hay estudios médicos, que yo sepa, pero es probable que cuando una persona empieza a saltar a la cuerda el ejercicio de aprender la coordinación necesaria, crea nuevas conexiones neuronales.
Otro de los puntos a considerar es que te ayudará a mejorar la coordinación. Si eres novato, lo habrás notado. No es lo mismo ver saltar a expertos, que intentarlo tú mismo las primeras veces. Parece que la cuerda tiene vida propia y no obedece a tu cerebro… es normal.
La cuerda te aportará un plus de coordinación que lógicamente irás ganando poco a poco.
La forma correcta de saltar la cuerda
Empieza tomando los extremos de la cuerda con las manos a los lados de la cadera. Con los pies juntos, saltar la cuerda a unos centímetros del suelo mientras mantienes el torso recto y el cuerpo formando una línea.
Gira las muñecas rápidamente para hacer que la cuerda pase bajo tus pies una vez en cada salto. Intenta no mover demasiado los brazos y mantener los codos siempre a los costados del cuerpo, esto te va a ayudar mantener el balance y a que no te pegues con la cuerda cada vez que saltas. Asegúrate de que la cuerda no sea demasiado larga o corta, de lo contrario puedes acabar enredado.
Así que ya lo sabes NO es necesario ser Rocky Balboa para saltar la cuerda, porque la vida no es solo estabilidad, es equilibrar volar y regresar a la tierra.
Foto: pixabay.com/.
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