La aclamada novela Lolita, de Vladimir Nabokov (1899, San Petersburgo, Rusia – 1977, Montreux, Suiza), se ha convertido en un referente de la literatura universal y un clásico moderno que juega con la fragmentación, los cambios de narración y la exageración en medio de la polémica. Es una obra meticulosamente investigada, que aparentemente se inspiró en el caso real de Sally Horner, y a través de la cual su autor analiza la influencia del paisaje, la cultura y la energía de su país adoptivo, los Estados Unidos, en las dinámicas de poder, sociales y expresivas.

En estas memorias ficticias del personaje Humbert Humbert publicadas en 1955, Nabokov juega con ideas que han sido la base de un sinfín de análisis desde su publicación, entre las que destaca la relación del estilo literario y la sustancia para cuestionar temas como, incluso, si el tabú puede convertirse en un gran tesoro creativo.

El escritor responsable de la novela era un hombre meticuloso en su vida privada, que fue desarraigado primero por la Revolución Rusa y después por la Segunda Guerra Mundial, para finalizar como un nómada permanente. Algunos dicen que esta novela incluso le dio forma al rock 'n' roll, pero antes explora temas como la perversidad y la obsesión, la vida en los suburbios y la cultura de consumo estadounidense. Forma parte de las obras del exilio y la falta de hogar. Todo esto gira en torno a ideas generales de la mujer y la inocencia, pero también desde una mirada fantasiosa masculina, para observar los patrones que repetimos y su relación con la memoria y el destino. Lolita así representa facetas de la vida antes que la verdad, es decir, las posibilidades de la literatura y, en esencia, del arte, como podemos atestiguar con el destacado montaje teatral El Orgullo de Lolita (Lolita's Proud).

El Orgullo de Lolita rememora una historia de obsesión de Humbert Humbert por Lolita, que mezcla fragmentos de amor en un itinerario a través de la locura y la muerte, a la vez narrada con la ironía y el lirismo desenfrenado del propio Humbert Humbert.

La compañía teatral Génesis, encabezada por Miguel Ángel Palma, presenta esta esperada reversión de la novela, protagonizada por la modelo y actriz Jessica Pérez Aceves, quien en el montaje que se presenta en el Museo de la Ciudad, ubicado en el Centro Histórico en Querétaro, sorprende por el tour de force para encarnar a Lolita.

Con respecto a la obra, Miguel Ángel Palma nos comentó en exclusiva algunas bases del montaje, así como el arduo esfuerzo y las iniciativas que tomó el equipo actoral conducido por la directora de escena, Leticia Pizano. "La adaptación no es solo de la novela de Vladimir Nabokov, sino que también adaptamos las escenografías de las películas que se basan en la novela, tanto la de 1966 de Stanley Kubrick como la de 1997 de Adrian Lyne, que fue un éxito crítico aún mayor, en la que sobresale la interpretación de Jeremy Irons en el papel de Hubert Humbert, así como Dominique Swain en el rol de Lolita".

"Adaptar las escenas en un escenario teatral tiene sus complicaciones; sin embargo, logramos los cambios de escenografía adecuados para mostrar etapa tras etapa de la vida cotidiana de Lolita, desde su arribo a Rhode Island con su madre, Charlotte Haze. Plasmamos elementos clave en la escena, como la importante cantidad de libros que había esparcidos tras la apertura de cajas de la mudanza, junto a una serie de cuestiones que construyeron ese primer cuadro escénico y marcaron la pauta para el desarrollo de los personajes. Posteriormente, esto nos permitió destacar la fuerza de la fotografía en el montaje, esencial para que el conflicto dramático crezca con la aparición del pornógrafo y pedófilo, Clare Quilty, un aparente rival de Humbert y un personaje clave para contrastar las reflexiones y dualidades de la obra".

"Al dar a entender que Clare está filmando y sacando fotografías de bellas jóvenes modelos, logramos nuestro cometido de remarcar una escena crucial, que revelara a una nueva Lolita que ya es capaz de ser hiriente y sarcástica. Con esta decisión, buscamos presentarla como una figura emancipada, empoderada, valiente y no solo como una víctima de experiencias tan terribles como una violación o abuso. Es un elemento central para contrastar la narrativa y escenas en las que Lolita revela momentos sensibles con Humbert Humbert, además de permitirnos proponer caminos que trasciendan la novela. Este camino nos permitió crear espejismos sublimes con una Lolita de 14 años de edad que, con base en la interpretación de Jessica, expande la historia y sus posibilidades".

Jessica abundó en el tema: "El personaje Lolita muestra cómo las situaciones y contrastes son importantes en el contexto de la relación madre e hija (con Charlotte) y su posterior evolución. Al principio, es una niña contestona y enojona, pero luego se revela madura e incluso comprende que puede tener poder sobre adultos que tienen una mayor experiencia de vida".

 

 

 

 

 

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Miguel Ángel Palma asimismo destacó el libreto de Mixel Angerua y a la Lolita que presenta: "diferente, más expresiva, proyectiva y con una capacidad histriónica increíble para resolver las situaciones a las que se enfrenta; también es manipuladora, sarcástica e irónica, como se anuncia en el nombre de esta versión, El Orgullo de Lolita. Es una Lolita fuerte que soluciona conflictos, pero no deja de ser una niña, incluso una niña precoz y hasta sensual dentro de los márgenes de la novela. Forma parte de una búsqueda del equipo creativo, que sensibiliza a los actores y, desde luego, al público, con el emotivo reencuentro espiritual que ofrece este montaje teatral".

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Auditorio del Museo de la Ciudad de Querétaro
Dirección: Calle Vicente Guerrero Nte. 27, Centro, 76000 Santiago de Querétaro, Qro., Querétaro.

Próximas fechas
- 26 de julio de 2023 | 20:00 hrs.

Redacción