Fue un 29 de junio de 1964 cuando se publicó por primera vez el clásico de las novelas gráficas: Mafalda, y el responsable detrás de esta genialidad, es el autor argentino quien se convirtió en un ícono del género, hablamos nada más y nada menos que de Quino. Desde entonces, la crítica y el espacio para el humor en ella, llegó con una niña de tan sólo 6 años, bastante simpática, pero escandalosa que no se guardaba nada y se atrevió a poner en duda todo lo que el mundo adulto le “ocultaba”. 

"Yo quisiera seguir dibujando pero ya mis ojitos no me dan", confesó Joaquín Salvador Lavado (Quino) en noviembre del 2013. Hoy despertamos con la lamentable noticia de que sus ojitos ya no dan para un día más. A sus 88 años, Quino ha dejado este plano, pero con un legado que lo recordará siempre. 

"Se murió Quino. Toda la gente buena en el país y en el mundo, lo llorará", dijo Divinsky, su editor. Al respecto de la lamentable noticia, la familia explicó que el fallecimiento se produce por "razones propias de la edad y derivaciones de su salud de este último tiempo", habiendo vivido su vida "íntegramente". 

A pesar del tiempo pasado, Mafalda sigue vigente en la historia de la literatura latinoamericana, quizá hasta del mundo. Sin importar los años, Mafalda siempre será la niña de 6 años contestataria, que reserva capas de humor negro, irónico, sin dejar de un lado la inocencia que representa tener esa edad. 

Para conmemorar la muerte del maestro Quino, te damos algunos datos curiosos que habitan detrás de la niña más famosa y agridulce de la literatura. Empecemos con que su apellido siempre fue un misterio, la decisión de no darle una identidad determinada permitió al autor que este personaje pudiera transitar entre los años sin ninguna carga familiar, hay rumores que indican que su apellido comienza con la letra “M”, pero de eso no se está seguro, ni mucho menos se sabe más. 

Es bien sabido, que a Mafalda le encantaba nutrirse de entretenimiento popular, como a cualquier niña de su edad. Sin embargo parecía que para su gusto musical tenía un gusto exquisito, pues su banda favorita son los Beatles, pero como no deja de ser una niña, su caricatura favorita es el Pájaro loco. Esto, sin duda, habla de un contexto temporal en el que fue creada, pero que incluso tampoco se aleja de lo que hoy en día sucede con ambas áreas de la cultura popular. 

Entre el humor de esta niña y su gran visión del mundo adulto, su mascota se llama Burocracia, y optó por darle este nombre porque es una tortuga y camina lento. 

Seguramente alguna vez te dijeron que ya te parecías a Mafalda por no querer comerte la sopa, y esto viene de que el enemigo número uno en la vida de esta pequeña niña, es la sopa. La detesta, incluso cuando la amenazaban con que quienes no se terminan la sopa no crecen, ella siempre contestó: “¡Qué tranquilidad reinaría en este mundo, si Marx no hubiera tomado sopa!”. Quizá por eso es que, hasta la fecha, Mafalda sigue teniendo 6 años. 

Con su innegable éxito, Mafalda ha sido traducida en más de 30 idiomas en todo el mundo. Para así compartir el secreto de la eterna juventud y sus queveres con la sopa. 

Sin embargo, el inicio que dio pie a todo esto, está muy alejado de lo que resultó ser. Mafalda, de inició fue fue concebida para promocionar una marca de lavadoras. Y para el bien de la humanidad, estas tiras nunca vieron la luz y un año después Quino retomó su proyecto, y el resto es historia. Incluso, tuvo una serie animada de 104 episodios producida por la empresa española D.G Producciones.

Descanse en paz, Joaquín Salvador Lavado “Quino”.

Paulina Martínez