Cambian las cifras, y con ellas los años. Se modifican las formas, los gustos, cambia la fecha y el calendario. Invariablemente cambiamos en costumbres, en formas, en ratos; sin embargo, algo permanece inmóvil en nosotros: nuestra naturaleza humana, lo que nos hace ser quienes somos, aun y cuando seamos distintos cada día. 

Sin embargo, algo que nunca cambiará es ese gusto por saber qué nos deparará el futuro, y qué mejor si está lleno de fortuna. La astrología ha fascinado a los seres humanos durante cientos y miles de años. Miraban al cielo, examinaban la posición de las estrellas, observaban el lento viaje de los astros a través del universo y, con todo ello, trataban de componer un mapa del futuro con el que vivir mejor su vida, muchas veces, actual. Y lo seguimos haciendo. 

Seguro que te has dado cuenta de que el horóscopo ocupa un espacio en un gran número de revistas y periódicos, ya sean diarios, semanales o mensuales. Será por algo, ¿no crees? 

Sin embargo, si quieres conocer a profundidad la ciencia de la astrología, debes ir más allá de nuestro zodiaco occidental para entender también otro todavía más antiguo: el zodiaco chino. 

En la tradición china se utiliza el calendario lunisolar, es decir que toma en cuenta las fases tanto del sol como de la luna. A partir de esto se determina que las celebraciones del Año Nuevo comienzan el primer día del mes lunar y terminan el día 15 (en luna llena) con una celebración llamada Festival de los Faroles.  

De forma específica, el día para el inicio del año cae en la luna nueva más próxima al día equidistante entre el solsticio de invierno y el equinoccio de primavera. Por ello, es una fecha variante; por ejemplo, en 2020 fue el 25 de enero, mientras que en 2021 se dará hasta el 12 de febrero. 

La astrología occidental enfatiza el día y el mes en que una persona nació. El sistema chino, por el contrario, considera el año de nacimiento como el factor más importante para determinar el destino de una persona. 

Las creencias chinas dicen que hay 12 animales que representan el horóscopo. De hecho se cree en este sistema que la personalidad de un individuo, así como los acontecimientos dramáticos que ocurren en su vida, están determinados por los rasgos del animal del zodiaco asociados con el año de su nacimiento. 

En esta ocasión, se dedica al Buey, y de acuerdo con el significado del horóscopo chino, este animal representa la prosperidad que se obtiene a partir del trabajo duro. Por eso en esta nomenclatura quienes nacen en este año suelen ser personas pacientes, trabajadoras, organizadas, con metas claras y ambiciosas. También se relaciona con la tranquilidad, pasividad y nobleza.

Asegura el horóscopo chino que los bueyes tienen buena salud, tienden a mantenerse en forma y enfermarse poco; sin embargo, pueden confiarse demasiado de su buena condición y, siendo adictos al trabajo, suelen comer mal y a destiempo, lo cual tiene consecuencias; además, son poco dados a hacer ejercicio. 

Para celebrar el Año Nuevo Chino se tiene la costumbre de limpiar las casas, para purgar la mala fortuna y dar paso a la buena suerte por venir. Las ventanas y puertas se decoran con recortes de papel rojos y símbolos populares de "buena suerte", "felicidad", "riqueza" y "longevidad". Los fuegos artificiales alumbran los cielos y la gente intercambia dinero en sobres rojos. 

Una creencia igualmente significativa pero menos extendida es que cada año lunisolar está también acompañado por uno de los cinco elementos: madera, fuego, tierra, metal y agua. 

De acuerdo con la filosofía tradicional china, estos cinco elementos también se ven afectados por el delicado equilibrio del Yin y el Yang (conceptos del taoísmo, que son usados para representar o referirse a la dualidad, opuesta pero complementaria de la existencia). Por ejemplo, el 2021 será tanto el Año del Buey como del Yin Metal, mientras que el 2022 será el Año del Tigre y del Yang Agua. 

Para identificar su propio signo del zodiaco chino, simplemente haga coincidir su año de nacimiento con su animal correspondiente. Hacerlo también puede ayudarte a determinar el elemento que coincide con tu signo del zodíaco. 

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Iván González