La vida de todo corredor o amante del ejercicio representa un reto día con día. Una vez que hemos superado el primer obstáculo de ir en contra de nuestra voluntad por seguir más tiempo en cama o dejar la tarde para descansar, según sea nuestro horario para ejercitarnos, los pretextos se siguen presentando de manera silenciosa. 

Uno de los principales factores que nos detienen para salir de casa casi siempre es el clima, sobre todo cuando solemos ejercitarnos al aire libre. Ahora que las lluvias están por irse, el frío está estacionando sus bajas temperaturas en nuestros días, otra excusa que nos hace dudar de salir de casa. 

Sin embargo, los pretextos siempre serán parte de nuestras vidas, pero será mejor vencerlos y ser fieles a nuestras metas y sueños. Porque ejercitarse es solo una parte de nuestros planes, no decidimos hacerlo únicamente por motivos inmediatos como la vida saludable, bajar de peso, o demás, tenemos una meta que trasciende todos esos puntos y nos estamos encaminando a ella. 

En ese sentido, no dejes que nada se interponga entre tú y tus sueños. Ahora que estamos en otoño y el frío comienza a calar los huesos, será mejor estar preparados para lo que venga, pero nunca dejar que interfiera con nuestra rutina. Por eso ahora te damos unas recomendaciones fundamentales, para que ejercitarte en temperaturas bajas no resulte contraproducente, sino un cambio de escenario para continuar edificando tus metas. 

Antes de continuar, destacamos que hacer ejercicio es beneficioso tanto para la salud física como para la mental. Ahora que el invierno está más cerca y la temporada de celebraciones decembrinas también, muchos son afectados por la depresión invernal. Ejercitarse es una gran alternativa para curar o evitar llegar a ella. 

Igualmente, ejercitarse en temperaturas bajas tiene más ventajas de las que te imaginas. Por mencionar algunas, si hablamos de correr hablamos de un mejoramiento radical en tu entrenamiento y resistencia. Ya que cuando hace calor es más incómodo realizar entrenamientos largos. Con un clima frío el cuerpo se enfrenta a un mayor reto y puedes profundizar en ello. 

Asimismo, quemas más calorías cuando te ejercitas en el frío. Debido a que tu cuerpo necesita más energía para mantenerse en una buena temperatura, nuestro sistema entra en un proceso llamado termogénesis, el cual trata de transformar la energía en calor. De esta manera, el nuestro cuerpo supone un mayor consumo energético. Por otra parte, nuestro sistema inmunológico se potencia cuando nos ejercitamos al aire libre. 

Para que los beneficios se vean reflejados y evitemos que resulte lo contrario, es recomendable seguir las siguientes recomendaciones para ejercitarte al aire libre en bajas temperaturas. 

Calentamiento eficaz

Es fundamental nunca saltarse el calentamiento previo ni mucho menos los estiramientos posteriores. Si ya son importantes siempre, lo son aún más en condiciones de temperaturas bajas, ya que es importante entrar en calor antes de salir a la calle y enfrentarse a un cambio brusco de temperatura. 

Respira por la nariz 

Si bien, se habla de la posibilidad de altener nariz y boca mientras uno se ejercita, es importante destacar que en condiciones de temperaturas bajas será mejor evitar respirar por la boca. Es mucho más conveniente hacerlo únicamente por la nariz, ya que se trata de una vía natural que calienta el aire que inhalas para que lo exhales por la boca. 

Haz del viento tu amigo

Al contrario de lo que podría pensarse, el viento puede convertirse en tu mejor amigo. Cuando comiences el entrenamiento (si se trata de correr), primero empieza a hacerlo con el viento en contra y para volver elige el viento a favor. Si está muy frío e intenso, es recomendable cubrirse la nariz y la boca con una bufanda tubular y la frente con un gorro. 

Un consejo: si quieres aprovechar el viento fuerte para entrenar la resistencia, puedes correr 10 minutos con el viento a favor y otros 10 con el viento en contra e ir combinando. 

Ahora explora algunos de los mejores sitios en la ciudad para ejercitarte al aire libre.

Parque México

Entre los límites de la Roma y la Condesa, está uno de los principales parques de la ciudad: El Parque México. Con una superficie elíptica pavimentada de aproximadamente 1 km, en donde puedes correr, andar en bicicleta o solo caminar, este parque es una excelente alternativa para  ejercitarte al aire libre y entre la naturaleza. Igualmente, tiene un gimnasio al aire libre. 

Dónde: Av México s/n, Hipódromo, Cuauhtémoc.

Parque Hundido

Con una pista de aproximadamente 1.2 km de asfalto, este parque cuenta con subidas y escaleras de por medio para brindar una gran alternativa a tu entrenamiento. Igualmente, encontrarás un gimnasio urbano en el que podrás explorar más diversidad en tus ejercicios. 

Dirección: Av. Insurgentes Sur s/n, Extremadura Insurgentes, Benito Juárez

Viveros de Coyoacán

Se trata de un parque destinado a la producción de árboles para reforestar a la ciudad, y es una de las mejores opciones para entrenar. Con una pista de 2 km y medio, aquí podrás vivir una experiencia en la que el ejercicio y la naturaleza conviven amablemente. 

Dirección: Progreso s/n esq. Universidad, Coyoacán, Coyoacán.

 

Paulina Martínez