Focos rojos en una amistad
Sí, los amigos también pueden ser tóxicos
Nora Morales
Publicado el 24 de Julio de 2020
Es muy común que asociemos la toxicidad en una persona que es tu pareja, casi se ha convertido en un tópico en medios de comunicación, lo que hace que muchas veces vivamos situaciones dañinas que no catalogamos de esa forma, porque son amigos o conocidos.
Y muchas veces al no catalogarlas de forma idónea, soportamos acciones que no deberíamos, lo que termina por lastimarnos.
Así pues, veamos cuatro señales escondidas en una amistad tóxica.
Le encanta hablar de sí mismo
Claro que todos conocemos a alguien que le encanta hablar de sí mismo, y si eres una persona que te gusta escuchar, tal vez no encuentres mucho problema en esta característica. El problema radica cuando es un amigo cercano, el cual sólo habla de sus problemas pero cuando tú eres el tema, simplemente deja de escuchar.
Por lo que si eres un depósito de desahogos sin recibir lo mismo de vuelta, es muy complicado que te haga bien, más bien drena tu ánimo.
Te sientes bajo una lupa
Cuando necesitamos un consejo sincero, es muy común recurrir a una amistad cercana, la que te dirá la verdad si te ves bien o no, si estás actuando de la mejor manera o no. El problema es cuando cada cosa que dices, piensas, haces o vistes está bajo una lupa en la que te sientes evaluado, juzgado o criticado.
Por lo que si los comentarios de alguien cercano te hacen sentir inseguro más de lo que te traen confianza, es difícil que sea una buena persona para ti.
Bonus: si además de hacerte sentir mal, te intenta manipular y dice que tus problemas personales son los que te hacen tomarte las cosas como ataque. Huye.
Primero muerto que pedir disculpas
No es una cuestión única de estas personas que les cueste aceptar sus errores, eso es algo casi normal con lo que cada cual debe trabajar, el problema viene cuando no pide disculpas cuando se equivoca, sólo prefiere actuar como si nada hubiera pasado y olvidarlo.
Sin duda, las disculpas exigen que muestres vulnerabilidad y admitas tus errores, e implica esfuerzo, por lo que una amistad tóxica prefiere sólo barrer todo y esconderlo debajo de la alfombra.
Exige disponibilidad pero no la da
Tal vez una de las más notorias es que esa persona exige que siempre estés disponible, pero a ti sólo te da tiempo cuando sobra. Dejando en claro qué es lo que importa.
No basta decir que hacerte sentir culpable por no dar atención, no es una exigencia amorosa, sino un chantaje emocional. Sin duda, uno de los mayores focos rojos que no debes ignorar.
Una amistad como todo debe de ser recíproca.
Si notas más de un foco rojo y no crees que puedas conversar con la otra persona, tal vez alejarte es lo mejor que puedes hacer. La prioridad siempre es tu felicidad y paz.
FOTO: Adobe Stock
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