El 16 de agosto de 2010 en San Fernando, Tamaulipas, México, se descubrió una narcofinca con 73 cadáveres de migrantes ejecutados al aire libre y abandonados a la intemperie, provenientes del sur de México, Centro y Sudamérica. Un caso tan despiadado como indignante, enmarcado en los primeros años de la así llamada Guerra contra el Narco, en el que la impunidad y la falta de diligencia por parte de las autoridades mexicanas provocó la espera de al menos una década para que 18 personas relacionadas con el caso recibieran una sentencia condenatoria.

Es en este contexto que el guionista, productor y director neolonés José Luis Solís realizó La alberca de los nadies (México, 2022), un largometraje de ficción con el cual se cuestiona: “¿Por qué el grupo delincuencial de Los Zetas decidió la matanza masiva y dejar los cadáveres a la intemperie? ¿No hubo ningún migrante que intentó de alguna manera ser reclutado para evitar morir? ¿No había algún detenido que le sirviera vivo al cartel? ¿Qué pasó una hora y media antes de la masacre…?”. El largometraje busca generar un acercamiento a los posibles hechos y vivencias que las víctimas tuvieron que afrontar para poder sobrevivir.

Protagonizada por la reconocida actriz guatemalteca María Mercedes Coroy —Ixcanul (2015), Bel Canto. La última función (2018), La llorona (2019), Black Panther: Wakanda Forever (2022), así como la serie Malinche (2018)— y por Danny “Alex” Bautista —Los Ángeles (2014), Moronga (2018)—, La alberca de los nadies relata la historia Anayeli, quien está embarazada, y de Alex, dos migrantes indígenas mexicanos que buscan huir de sus captores, aunque para ello tengan que poner a prueba sus propios principios y ejercer la misma crueldad de la que son víctimas. A partir del secuestro de Alex, la historia aproxima al espectador a las diversas dinámicas de poder y terror de los cárteles del crimen organizado obligan a sus secuestrados a integrarse a sus actividades ilícitas a cambio de permanecer vivos, aunque eso implique permanecer presos dentro del mismo sistema como sicarios, esclavos, traficantes de drogas o ser parte de la trata de personas.

La estrategia de ambos será ganarse la confianza de sus captores para salvar a los otros prisioneros con la esperanza de que, tarde o temprano, los militares los rescatarán, o que planearán una huida exitosa de esa casona, hasta que deben tomar decisiones terribles, mientras que Juancho revela cómo fue que los narcos se apropiaron de los territorios de Tamaulipas así como su forma de reclutamiento.

“El largometraje expone cómo en tiempos de barbarie un grupo de seres humanos son obligados a cambiar radicalmente sus principios para poder sobrevivir, esta es la historia del vertiginoso caos del salvajismo actual donde los modernos campos de concentración se desarrollan en ranchos de lujo que han sido despojados de sus dueños y convertidos en fábricas de sicarios, prostitutas y esclavos del tráfico de drogas”, explica el director.

Tras un amplio recorrido por más de treinta festivales nacionales e internacionales, la película recibió 34 premios, entre ellos destacan el de Mejor Largometraje Internacional en el Fabrique Du Cinéma Awards (Italia, 2022), Mejor Largometraje Narrativo en el Barcelona Planet Film Festival (España, 2022); Mejor Película en el Festival de Cine sobre Migración de Nueva York y en el Festival de Migración y Medio ambiente de Canadá; el Premio del Público en Houston Latino Film Festival y en el Underground de Kansas City; el Gran Premio del Jurado y Mejor largometraje de Ficción en El Paso; Mejor película y mejor ensamble actoral en el Latino International Film Expo de Illinois; Mejor Película, Director, Actriz y Actor en Oklahoma Cine Latino, y los mismos laureles en el Iberoamericano de Caracas; Mejor película en el Festival de cine latinoamericano de Corpus Christi; Mejor Película, Director y Fotografía en Tequila; Mejor Actriz (María Mercedes Coroy) en el FICMY Mérida y en el Festival de Cine de San Cristóbal de las Casas (México, 2022), por último, habría que destacar el “Award of Merit in Film” otorgado por la comunidad internacional de académicos universitarios en el Latin American Studies Association Film Festival (Canadá, 2023).

Filmada y producida en Monterrey por la empresa regiomontana Kerosén Producciones, con el apoyo del programa de fomento Focine del Instituto Mexicano de Cinematografía y el Eficine Producción, La alberca de los nadies cuenta con la colaboración del cinefotógrafo Alejandro Cantú, cuatro veces nominado al Ariel; música original del compositor y productor musical Rodrigo Mier y Arce, y el tamaulipeco afincado en Monterrey, Damián Cano Ruiz como productor.

Esta película nos acerca, desde una perspectiva compleja de imaginar, a las problemáticas que diariamente generan estragos en nuestro país y otras partes de América Latina, como el racismo y la deshumanización de las personas que emigran en busca de condiciones más dignas de vida; además, del evidente universo bélico en que el crimen organizado trabaja de la mano con las fuerzas de seguridad públicas y privadas.

El estreno de La alberca de los nadies ocurrirá a partir de hoy jueves 14 de noviembre en diversas salas de la cartelera comercial y del circuito de exhibición independiente a través de Parábola Distribución y gracias al estímulo fiscal Eficine Distribución.

Información: Sergio Raúl López / Parábola Distribución

Redacción