¿Cómo poner en práctica mis sueños sin perder en el intento?
Descubre a tu emprendedor interior. Piensa como líder. Capítulo IV.
Alberto Ugalde
Publicado el 06 de Junio de 2022
¿Cuál es tu verdadera pasión o talento? ¿Podrías dejar lo que haces y echar a andar tu propio negocio, proyecto de arte o agencia de viajes y hasta solicitar subvenciones? A veces parece aventurado pero correcto y fácil decir: “sí, me aviento. Al fin y al cabo vida solo hay una”. ¿Dejarías un trabajo estable si tienes un hijo pequeño, sin haberte titulado aunque tengas experiencia y conocimiento en tu profesión? ¿Y si el plan no sale como quieres?
Tampoco es extraño sentirse abrumado por las circunstancias actuales, hay temores normales en cualquiera que esté contemplando un cambio de vida. No siempre es fácil el camino, pero puede asistirnos entender las veces que lamentamos no los riesgos que tomamos, sino, más bien, los que no.
No importa cuál sea tu sueño, no lo descartes. Si hay algo que te dice que tal o cual asunto es lo que quieres hacer, no está de más reconocerlo y pensar si podrías llegar a buen término con este sueño. Si te repites que los sueños son imposibles de alcanzar, muy fácil: caerás dentro del grupo de personas que no los persiguen. Que no es sencillo, como en el ejemplo inicial, claro que no. Sin embargo esa es una creencia y estas no son fijas. A veces es común que los sueños se abandonen pronto si uno cree estar dando palos de ciego. No obstante, si recuerdas lo lejos que has llegado no solo en este proyecto, sino en lo vivido hasta hoy, parecería prematuro rendirse.
Imagen: ar130405 en Pixabay
Prueba ir de excursión a la zona volcánica al sur de la CDMX, al cerro del Tepozteco o formación natural de mayor dificultad que prefieras (con responsabilidad). En la parte inferior puedes ver el monte y decidir que será una subida pesada y volver atrás. Otra opción es tomar el desafío y quizás sufrir, quizás disfrutar la subida. ¿Para qué eliges prepararte
Considera también que una cosa es el cariño y solidaridad de tus cercanos y otra la actitud escéptica de quienes casi reciclan malos diálogos de películas y, por ejemplo, expresan: “nunca serás exitoso” o algo parecido. Para ello y más es valioso adiestrar la disciplina mental y/o física. No para confrontar, sino evaluar, sin dejar de lado tu intuición, y olvidar “hubieras” que una de dos: o no se han trabajado para ser, o no existen.
Se innova con lo que se tiene y las duras expectativas y preocupaciones a veces son peores que los resultados reales. Además es inevitable fallar. Varios líderes exitosos del mundo lo han intentado y fallado varias veces antes de lograrlo.
Delante del miedo, hazte la siguiente pregunta: ¿cuál es el paso más pequeño para poner en marcha tu sueño? ¿Una campaña para reunir fondos? ¿La renta de un local? ¿Un estudio de mercado? ¿La beca para escribir el guion? Junto al primer paso vale la pena incluir un cronograma más o menos preciso hasta, por lo menos, el siguiente paso, uno a la vez, pero para continuar el patrón, ampliarlo con el tiempo y volverlo más dinámico en camino a tus metas.
Imagen principal: Shutterstock
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