Combate el sueño interrumpido con estos 3 trucos
Que tu descanso sea real y tendido
Paulina Martínez
Publicado el 25 de Enero de 2022
Dormir es uno de los mayores placeres que existen en el mundo, pero, ¿qué pasa cuando tenemos problemas para conciliar el sueño? Después de un largo día en el que hicimos nuestras actividades cotidianas, llega el momento de irnos a acostar, acurrucarnos con las cobijas y dejar que Morfeo llegue con nosotros y nos invite a su tierra onírica. Sin embargo, no todos podemos contar la misma historia cuando de dormir se trata.
Dormir no es sinónimo de descansar y es momento de que se hable del tema con la misma seriedad que se hace para temas de salud. Invariablemente, todo ser humano necesita dormir, para poder continuar caminando sobre este planeta. Hablamos de un hecho que por mucho que uno consiga dormir tres horas diarias y aún así ser “productivo” durante el día, es relevante para nuestra salud mental y física, porque de lo contrario estamos firmando una sentencia de una larga lista de problemas de salud.
Dormir es mucho más que cerrar los ojos para aterrizar en el mundo de los sueños. En realidad, es todo un proceso fascinante, porque aunque uno esté dormido, el cuerpo sigue trabajando. Al momento de “apagar nuestro cerebro”, las funciones de restauración, la adaptativa y la de preservación, que incluyen biosíntesis de moléculas como proteínas, regulación de metabolitos, selección de conexiones neuronales, generación de nuevas neuronas y mantención del Sistema Inmune, comienzan su jornada laboral.
Sin embargo, existen personas que quizá no tengan el problema para conciliar el sueño, pero sí suelen despertarse entre las tres o cuatro de la madrugada, ¿por qué pasa esto? Más allá de mitos y supersticiones sobre qué es “la hora del diablo” y demás ideas, te contamos que no eres la única persona a la que le pasa, de hecho es más común de lo que piensas.
La explicación científica la dio la doctora jefa de la Sección de Neurofisiología de la Unidad del Sueño del Hospital del Vall d'Hebron y miembro del grupo de trabajo de insomnio de la Sociedad Española del Sueño, Odile Romero.
Romero explicó sobre los ciclos de sueño: “Cada noche completamos un par o tres de ciclos de sueño, y a partir del primero (de unas tres horas) el nivel de alerta es más frágil. Por eso nos despertamos”.
Mientras que el segundo ciclo llega de manera natural, al igual que el tercero. Sin embargo, el problema es que esa interrupción del sueño le indica a nuestro cuerpo que ya hemos dormido unas horas, por lo que no necesitamos tanto descanso para este segundo y tercer ciclo. Esta es la razón por la que nos cuesta volver a dormir, pero no te preocupes, existen algunos trucos para combatir este problema:
- Los expertos aconsejan evitar mirar el reloj cuando el sueño se interrumpe en la madrugada, con tal de no generar ansiedad para volver a descansar nuevamente.
- Asimismo, es aconsejable no ver ningún dispositivo electrónico cuando esto pasa, ya que la luz manda una señal a nuestros cerebros para despertar y esto afecta nuestro ciclo natural de vigilia y sueño.
- Puedes ayudarte de algunas apps para meditar o alguna playlist con música relajada para dormir.
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